La salud de la princesa Charlène tiene en jaque a toda la realeza de Mónaco. Todo comenzó el 3 de septiembre del 2020 cuando la esposa del príncipe Alberto se desmayó. Ese día la princesa Charlène fue trasladada de urgencia a un hospital de Sudáfrica cercano a la zona de Durban. Si bien el alta llegó pronto todo fue de mal en peor.
Hace unas horas, una fuente anónima, que dice ser muy cercana a la princesa Charlène y al príncipe Alberto, realizó una serie de declaraciones en la que reveló detalles del misterio que envuelve al estado de salud de Charlène. “Lleva más de seis meses sin poder ingerir sólidos debido a todas las cirugías que se le han realizado desde entonces”, explicó la persona.
“Únicamente ha podido ingerir líquidos a través de una pajita, por lo que ha perdido casi la mitad de su peso corporal”, agregó sobre el estado de salud de la princesa Charlène que mantiene en vilo a la realeza de Mónaco. Incluso, aseguró que la esposa del príncipe Alberto “se siente exhausta después de seis meses de cirugías y a su incapacidad para alimentarse adecuadamente como resultado de las mismas”.
También reveló que la princesa Charlène “echaba desesperadamente de menos a sus hijos y a su marido mientras seguía atrapada en Sudáfrica, ya que no podía viajar de vuelta a casa”. La fuente se mostró bastante molesta con el tratamiento que la realeza de Mónaco le está dando al tema al señalar que “es injusto que se la esté retratando como alguien con algún tipo de problema mental o emocional”.
De esta manera, la persona cercana a la princesa Charlène y al príncipe Alberto sostuvo que no entiende “por qué se le está restando importancia desde palacio al hecho de que casi se muere en Sudáfrica”. Lo cierto es que desde hace unos días Charlène de Mónaco permanece internada esperando recuperarse de un enorme “cansancio” debido a su agotamiento físico y emocional.