La reina Letizia siempre se lleva las miradas con sus estilismos. Incluso sus outfits siempre son analizados bajo la lupa de los expertos en moda que encuentran en la soberana una referente en materia de tendencias, aunque también la toman muchas veces como el blanco de las críticas. Ella siempre cuida al máximo todos los detalles cada vez que aparece en público.
Su obsesión por la perfección no es ninguna novedad en la reina Letizia. Y si bien el protocolo no es lo suyo, lo cierto es que en materia de moda es algo que jamás cruza de línea. Pero en los últimos días, la consorte de España ha hecho algunas excepciones que valen la pena analizar.
La esposa del rey Felipe tiene una relación de amor odio con sus rodillas. Ella siempre luce faldas y vestidos en largo midi con las que las suele ocultar. Pero su distendido paseo por Mallorca junto a sus hijas no ha hecho más que demostrar que ella no tiene nada que esconder.
La reina Letizia rompió su propia normativa de tapar sus rodillas en los últimos días y lo hizo en dos oportunidades. Primero cuando se apareció junto al rey Felipe, la princesa Leonor y la infanta Sofía visitando locales comerciales en Palma. En esa oportunidad recurrió a unos shorts que no hicieron más que destacar que sus horas en el gimnasio rinden sus frutos.
Los brazos trabajados no es lo único de lo que la reina Letizia puede presumir más que orgullosa. Sus piernas también muestran el rastro de sus entrenamientos y sus rodillas se han lucido como pocas veces. Tampoco olvidemos el vestido mini de color rosa con el que dejó eclipsado a más de uno en una de sus salidas que incluyó a la reina Sofía.