Lady Di es una de las princesas más reconocidas en la historia de la realeza europea. Ella supo conquistar el corazón de miles de ingleses y también de otros países. Vale recordar las multitudinarias muestras de dolor y cariño de parte de los ciudadanos durante el recorrido del féretro de la madre de los príncipes William y Harry.
La princesa de Gales también sufrió el acoso permanente de la prensa y fotógrafos que siempre querían obtener una foto de ella. Fue un 31 de agosto de 1997, cuando Lady Di y su novio de ese momento, Dody Al Fayed intentaron eludir a los papparazzi. Su muerte fue a causa de las heridas producidas en un accidente automovilístico ocurrido en el interior del túnel del Alma, en París.
Aún en la actualidad, la madre del heredero al trono, el príncipe William, marca tendencia con los looks elegidos durante su corta vida. Sigue vigente en el mundo de la moda, donde muchas mujeres imitan los looks de la princesa. Han pasado más de 25 años de su muerte y es difícil imaginar cómo sería su rostro a los 62 años.
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Es por ello que La Vanguardia, utilizó dos aplicaciones que usa la inteligencia artificial para recrear el rostro de Lady Di con resultados sorprendentes y a la vez diferentes. El medio de comunicación utilizó FaceApp y Stable Diffusion para crear dos retratos de la royal y dar una idea a los fans de cómo sería su rostro a sus casi 62 años.
A través de FaceApp, Lady Di se ve con un rostro con líneas de expresión, propias de la edad, mientras que en una imagen creada por medio de Stable Diffusion, se puede apreciar a la princesa de Gales con sus rasgos característicos como sus inconfundibles ojos grandes y azulados. También mantiene su particular pelo rubio, incluso con un peinado similar al que repetía en sus apariciones públicas. En una segunda fotografía, la inteligencia artificial la dibuja con un aspecto poco reconocible para el público pues su cabello se vería totalmente liso a ras de la barbilla y una cara más ancha, si la comparamos con las imágenes de la época.