Recientes rumores afirman que el príncipe Enrique estaría pagando por una habitación en un hotel de lujo muy cercano a la residencia que tiene en California y donde actualmente vive con su esposa Meghan y sus dos pequeños. Estos rumores afirman que el príncipe paga por esta habitación para tener un poco de tiempo a solas y “escapar” de su esposa por algunos momentos.
Dicho lo anterior debemos decir que los rumores se quedan solo en eso, en rumores, y es que un representante de la familia ha confirmado con el portal Page Six, que esta información es falsa y el querido príncipe no paga una habitación en un hotel.
Esto no es cierto.
The Sun que es el medio que sacó a la luz estos rumores supuestamente confirmados por sus fuentes, también informa de que el príncipe estaría inscrito en un club privado en San Vicente Bungalows, lugar que también le serviría para escapar un rato de la familia como su bella esposa Meghan o sus dos hijos.
¿Hay problemas en casa?
La expareja real ha celebrado el viernes pasado, cinco años de matrimonio, por lo que como en toda relación amorosa han tenido sus altas y bajas, pero no, las cosas en casa solo parecen estar un poco tensa debido al reciente incidente que tuvieron con las cámaras al salir de un evento junto a la madre de Meghan y suegra del príncipe Enrique.
Te cuento con lujo de detalle que sucedió en este enlace, pero a grandes rasgos, la pareja tuvo que huir por varias horas en auto de los paparazis quienes “cazando” la información y las exclusivas, habrías causado la incomodidad de la pareja y un poco de desastre en Nueva York, tanto que hasta el alcalde mencionó detalles al respecto.
Está claro que los paparazzi quieren obtener la toma correcta, quieren obtener la historia correcta, pero la seguridad pública siempre debe estar a la vanguardia.
¿Qué hay acerca de este club?
El club que anteriormente te mencionamos, forma parte de los rumores y en realidad, si existe pero el príncipe no está inscrito o al menos eso es lo que sabemos, dicho club es muy estricto con las normas de seguridad y privacidad, un lugar en donde no puedes acceder con cámaras de ningún tipo y que a los teléfonos les ponen un filtro para no incomodar a nadie, también está prohibido que hablen entre sí.
La pareja aún quiere salir del ojo público por lo sucedido con los paparazis, pero fuera de ello, no hay problemas evidentes en su relación.