Según ITV News, el duque y la duquesa de Sussex finalmente empacaron y se mudaron de Frogmore Cottage, tres meses después de que el Rey Carlos III los desalojara de la propiedad. La casa, en Windsor, era su residencia oficial en el Reino Unido, en la que Harry y Meghan siguieron pagando el alquiler incluso después de que abandonaron la Familia Real y se mudaron a California.
Esto es un indicio, entre muchos otros, de que no tienen intención de volver a vivir al Reino Unido, y no pretenden pasar largas temporadas en el país de nacimiento de Harry, donde su padre es rey. El Palacio de Buckingham no dijo quién se mudaría a la casa, ni cuándo. El informe anual de Sovereign Grant muestra que Frogmore Cottage permanece vacante y un funcionario del palacio confirmó que Harry y Meghan "acababan de irse" y empacaron sus cosas.
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El príncipe Harry y Meghan devolvieron los 2,4 millones de libras esterlinas que se habían gastado con fondos públicos en la renovación de la cabaña antes de mudarse. Acordaron un alquiler reducido, cuando se mudaron a California, después de ofrecerse a pagar los costos de remodelación ellos mismos.
Cuando se les preguntó sobre las especulaciones de que el próximo inquilino sería el príncipe Andrés, los funcionarios reales se negaron a comentar. El duque de York, el hijo caído en desgracia de la difunta reina, actualmente vive con su ex esposa, Sarah Ferguson, en Royal Lodge, también en la propiedad de Windsor. Se especula que el Rey quiere que su hermano se mude, lo que liberaría la propiedad para el Príncipe y la Princesa de Gales y sus tres hijos. “No discutiremos ningún detalle de los acuerdos de arrendamiento privados del duque”, dijo Sir Michael al presentar el informe anual y las cuentas de la realeza para el último año financiero.
Cuando eran miembros de la Familia Real, algunos de los costos de Harry y Meghan se cubrieron con la Subvención Soberana, la cantidad de dinero recaudado de una proporción de las ganancias de Crown Estate para financiar el trabajo de la Monarquía. Al mudarse a California, los Sussex anunciaron que querían volverse financieramente autosuficientes y lo lograron a través de una serie de acuerdos lucrativos con Netflix, Spotify y la publicación de las memorias de Harry. El acuerdo de Spotify se canceló después de una temporada de podcasts de Meghan, llamados Archetypes.
Desde entonces, las relaciones entre ellos y el resto de la Familia Real se han deteriorado, llegando a un punto bajo después de su serie de Netflix de seis partes el año pasado y el libro de Harry este año cuando hizo una serie de acusaciones sobre su hermano, el Príncipe William y su madrastra la reina Camila.