Javier Santos no cesa en su lucha por conseguir el reconocimiento filial con Julio Iglesias. El joven lleva desde 1991 intentando demostrar que el cantante es su padre biológico, por ello inició una batalla judicial para que la justicia le diese la razón. Sin embargo, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo, Francia, decidió no reabrir el caso.
Por ese motivo, los abogados del joven que afirma ser hijo de Julio Iglesias presentarán su caso a la Organización de Naciones Unidas. Los argumentos que esgrimen son: “Presentar demandas contra los otros hijos de Julio fuera de España", "poner en conocimiento de la OMS la disfunción entre genética y justicia y potenciar la figura de un mediador". Javier Santos y su madre, María Edite Santos, han acudido a los medios de comunicación durante estos con el fin de que el cantante lo reconozca.
Javier Santos consiguió demostrar con una prueba de ADN que el artista era su padre biológico, incluso fue declarado oficialmente como su hijo en julio del 2019. Sin embargo, en mayo del 2020 fue rechazada esa prueba de paternidad, ya que el ADN fue tomado de una botella que Julio Iglesias tiró a la basura. Por lo que se considera que esta muestra fue tomada de manera ilegal.
La madre de Javier Santos contó en un programa de televisión cómo conoció a Julio Iglesias y sobre la presunta paternidad. María Edite conoció al cantante en el 1975, ella trabajaba como bailarina en una producción y según ella él le dijo: "Él estaba en mi camerino y me preguntó si quería ir a su chalet". En el programa ella estaba acompañada de su hijo.
María Edite también declaró que su relación con Julio Iglesias duró poco menos de diez días. Explicó el motivo por el que tardó unos años en pedir que el cantante reconociera a Javier en los juzgados: "Me he esperado a que mi hijo tuviera edad para entenderlo. Yo no le podía decir que mi marido no era su padre".