Si hay alguien que siempre ha sido reconocido como un seductor incurable ese es Julio Iglesias. Tal es así que una de sus más grandes y recordadas canciones se la debe a una musa que se hizo con su corazón, la muchacha se llamaba Gwendolyne Bollore. Ahora, muchos años después del auge de Iglesias como fenómeno musical, las hermanas que supieron ser sus coristas conocidas como "Trix" o "Las Trillizas de oro", han comentado algunas infidencias de aquellos días.
Julio Iglesias ha sido reconocido como el artista latino más exitoso de la historia, y también como el artista que más discos ha vendido en más idiomas en el mundo; sin embargo de lo único que él se ha jactado siempre ha sido de tener más de tres mil amantes en su haber. La realidad es que él no desconocía su fama como seductor y de hecho se ocupaba de alimentarla; durante su última visita a Argentina, en televisión abierta le robó un beso a la famosa conductora de aquél país, Susana Giménez. Aquello que en algún momento estaba “naturalizado” hoy presentaría un verdadero problema, al respecto han reflexionado las artistas argentinas conocidas como “Las Trillizas de Oro” bajo el nombre de "Trix".
María Laura, María Emilia y María Eugenia Fernández Rousse, conocidas popularmente como “Las Trillizas de Oro”, supieron ser coristas de Julio Iglesias hacia fines de los 70, en pleno auge del cantante. Durante una entrevista en un programa radial fueron consultadas por su experiencia junto a Iglesias y cómo se relacionaba este con sus fanáticas y demás mujeres.
Apenas consultada una de las trillizas dijo: "Julio Iglesias era un maestro. Este señor sigue siendo un genio". Pero rápidamente otra de ellas la interrumpió con un tono más reflexivo; "Hoy estaría en cana (preso), porque no solo se acercaba a las minas, sino que las tocaba. Hoy estaría con un juicio que le darían cadena perpetua, era cariñoso y afectuoso", sentenció entre bromas y verdades una de “Las Trillizas de Oro”.
Una vez abierto el tema, la tercera hermana que aún no se había pronunciado afirmó: "Le daba besos en la boca a todas y las seguidoras muertas con él, hacían cola". Las tres damas omitieron mencionar los nombres de las mujeres que pasaron por el camarín de Julio Iglesias durante ese periodo. Luego “Las Trillizas de Oro” fueron consultadas sobre si alguna vez intentó acercarse con segundas intenciones a alguna de ellas; "Nunca pudo, estábamos rodeadas de mamá, papá, nuestro representante, no podía ni mirarnos. Teníamos 18 y el 37, no éramos fanáticas, lo que te ayuda para ser compinche (cómplice). Él nos trataba como sus niñas, pero niñas como dice la palabra", sentenciaron las hermanas.